Pocos destinos en la tierra son tan evocadores como Borneo. Borneo, la tercera isla más grande del planeta, es un lugar misterioso y áspero de increíble interés natural con anchos ríos, picos nublados, selva virgen y una gran diversidad de fauna y flora. Este viaje presenta este paisaje idílico de Borneo al visitar dos de sus más accesibles parques nacionales: Mulu y Kinabalu. La diversión comienza en el Parque Nacional de Mulu, que cuenta con toda una serie de lugares atractivos; entre estos la Cueva de Lang – el pasillo subterráneo más grande del mundo – y la Cueva de los Ciervos con su colonia de millones de murciélagos “cola gruesa”. Otras cuevas que vale la pena explorar son la Cueva del Viento y la Cueva de Agua Clara, que hacen parte de la Cámara de Sarawak, el mayor sistema de cuevas conectadas del mundo. A corta distancia del Parque Nacional de Mulu se encuentra Kota Kinabalu, el punto de partida para el Parque Nacional Kinabalu, hogar de la montaña más alta del sudeste asiático, así como de varias especies de flora y fauna tales como las raras y hermosas orquídeas “zapatillas de dama” y la “copa de mono”, la planta insectívora más grande del mundo.
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